Realizar un rebranding es una decisión estratégica importante para cualquier empresa y contribuye a revitalizar y reposicionar la marca en el mercado, por lo que debes tener muy claro los motivos por los cuales deseas hacerlo y cuáles son aquellos momentos más apropiados para dar este paso.
Para iniciar, veamos primero aquellos 10 motivos (“Por qué´s”), que desde mi experiencia asesorando a compañías de múltiples industrias, tamaños y mercados, traen consigo la necesidad de realizar un rebranding:
1. Sentido de Renovación: Lo primero y más tangible de un proceso de rebranding es ver y sentir cómo se actualiza y moderniza la imagen de tu marca, lo que puede atraer a nuevos clientes y generar un sentido de orgullo interno por parte de tus colaboradores, al mostrar un enfoque fresco y actualizado.
2. Diferenciación de la competencia: Al rebrandear tu marca, puedes destacarte de tus competidores directos y establecer una identidad única y distintiva en el mercado. No se trata de cambiar por cambiar, pero si siente que tu marca se está quedando anquilosada en el tiempo, sí que vale la pena encontrar un territorio exclusivo y con mayor poder de atracción para tu marca.
3. Expansión: Evolucionar tu marca puede ayudarte a adaptar tu compañía a diferentes segmentos de mercado o a expandirte a nivel internacional, permitiéndote llegar a nuevos públicos y oportunidades de crecimiento. Es clave considerar, en caso de que así aplique, definir una arquitectura de marca clara que te permita organizar igualmente tu portafolio de productos, para facilitar la comprensión de cuál es tu oferta.
4. Mejora de la percepción de la marca: Si tu marca ha sufrido una imagen negativa o está estancada, el rebranding puede ayudarte a cambiar la percepción de los clientes, renovando su confianza y lealtad hacia tu empresa.
5. Alineamiento con los cambios del mercado: El mercado y las preferencias de los clientes están evolucionando constantemente. Al realizar un rebranding podrás adaptar tu compañía más fácilmente a estos cambios y asegurarte de que tu marca siga siendo relevante y atractiva para todos tus stakeholders.
6. Reflejo de los valores y el propósito: Si tu marca ha evolucionado en términos de valores, propósito o enfoque estratégico, el rebranding es un excelente punto de partida para comunicar de manera efectiva estos cambios y alinear tu identidad de marca con lo que representas y quieres proyectar como empresa.
7. Generación de entusiasmo interno: El rebranding puede revitalizar a tus colaboradores y generar un nuevo sentido de orgullo, pertenencia y compromiso. Incluso, trae consigo un impacto positivo en la cultura de la empresa y en la motivación de los empleados. Es un proceso que debe desarrollarse de adentro hacia afuera, porque como dice nuestra premisa estratégica en Heart: “Tu marca jamás podrá prometer lo que tus empleados no hayan logrado interiorizar”.
8. Eleva la marca empleadora: Una marca renovada y atractiva puede ser un factor clave para atraer y retener talento cualificado.El rebranding puede ayudar a posicionar tu empresa como un lugar deseado para trabajar. Según Great Place to Work, el 75% de las personas consideran el poder de la marca antes de postularse a un nuevo trabajo.
9. Incremento de la visibilidad y el reconocimiento: Un rebranding efectivo puede generar un mayor reconocimiento demarca y aumentar la visibilidad de tu empresa. Esto puede conducir a mayores oportunidades de negocio y un crecimiento en la cuota de mercado.
10. Impulso de los resultados financieros: A través de un proceso de rebranding profesional, puedes mejorar el equity de tu marca. Haciéndolo bien, podrás reclamar un mayor valor en el mercado, capturar mayores márgenes y por supuesto lograr un mejor rendimiento financiero a largo plazo.
Ahora bien, ¿cuándo podría ser el momento más apropiado para considerar un rebranding? Aquí te comparto 10 recomendaciones claves:
1. Cambio en la dirección estratégica: Si tu empresa ha experimentado un cambio significativo en su dirección estratégica, como ingresar a nuevos mercados, lanzar nuevos productos/servicios o adoptar un propósito de triple impacto para ir en sintonía con el planeta, las personas y cuál es su contribución económica, un rebranding puede ser muy oportuno, para lograr reflejar estos cambios y alinear la marca con la nueva dirección.
2. Fusión o adquisición: Cuando tu empresa se fusiona con otra o por el contrario adquiere una nueva empresa, puede ser necesario considerar un rebranding para unificar las identidades de marca y comunicar de manera efectiva y coherente el resultado de dicha sumatoria. Al final, debe mostrar los beneficios de esta unión de forma clara donde se hagaevidente el 1+1=3.
3. Nuevos Mercados: Si estás planeando expandirte a nuevos mercados, un rebranding puede ayudar a adaptar tu marca a las preferencias y sensibilidades culturales locales, asegurando que tu mensaje sea relevante y efectivo en cada mercado.
4. Cambio en la audiencia objetivo: Si tu empresa está cambiando su enfoque hacia nuevos segmentos de mercado o está tratando de atraer a una audiencia diferente, un rebranding puede ayudar a redirigir la estrategia de comunicación y crear una identidad de marca que resuene con la nueva audiencia.
5. Actualización de la identidad de marca: Si tu marca se ha vuelto obsoleta o está desactualizada, un rebranding puede ser necesario para renovar la imagen de tu empresa, potenciar las percepciones asociadas a tu marca y mantenerla relevante en un mercado cada vez más cambiante. Muy importante conocer las propiedades más valoradas por tus grupos de interés para conservarlas en esta transición.
6. Superar una crisis reputacional: Si tu marca ha sufrido una crisis de reputación o un desgaste de cara al mercado originado por acciones o estrategias erradas, un rebranding puede ser una forma efectiva de reconstruir la confianza de tus stakeholders y cambiar la percepción negativa asociada con la marca.
7. Cambio de nombre de la empresa: Si tu empresa decidiera cambiar o ha cambiado ya de nombre, ya sea por razones legales, estratégicas o de otro tipo, un rebranding es definitivo para ayudar a comunicar y reforzar el nuevo nombre que representará a la empresa de cara al mercado.
8. Celebración de un aniversario especial: Es un buen momento y una buena excusa para dar este paso. Celebrar con un lifting de marca (renovación) es una manera de agradecer a quienes han contribuido para hacerlo posible (colaboradores y clientes), mostrando una cara renovada, amable y cercana, que servirá como bandera para dar la bienvenida al futuro, sin olvidar las buenas prácticas del pasado.
9. Innovación y evolución de productos: Si tu empresa experimenta una innovación significativa en sus productos o servicios, un rebranding puede ayudar a comunicar y posicionar correctamente estas novedades en el mercado.
10. Competencia y diferenciación: Si tu marca se enfrenta a una fuerte competencia en el mercado y está luchando por destacar, un rebranding puede ser una estrategia efectiva para diferenciarte y “sacar la cabeza” entre tus competidores.
En resumen, el rebranding ofrece una serie de beneficios importantes para tu marca, desde la actualización de la imagen y la diferenciación frente a la competencia, hasta la mejora de la percepción y el impulso de los resultados financieros. Sin embargo, es importante planificar y ejecutarlo de manera estratégica y cuidadosa para asegurar su éxito y minimizar cualquier impacto negativo potencial.
Dos recomendaciones finales: Un rebranding no solo implica rediseñar tu identidad de marca, empieza por evaluar si tus cimientos estratégicos también deben evolucionar y muy importante, haz partícipe a tu gente del proceso, pero nunca que sean ellos los responsables directos de su diseño, conceptualización y desarrollo (Conozco algunos casos fallidos donde abren concursos internos para hacerlo, pensando que es el camino apropiado). No olvides: "Zapatero a sus zapatos", por esto acompáñate de una firma experta para asegurar un resultado del que todos se sientan orgullos y del cual tus colaboradores quieran ser sus mejores embajadores.